No. 11
Cualquier transacción trae siempre consigo un pacto de confianza. Das algo a cambio de otra cosa, algo que ya has valorado como un intercambio justo. Tal vez a veces no necesitas sólo tener fe, pero es común tener que atenerse a lo que se te promete a ciegas, lo cual no puede ser bueno.
Últimamente he estado peleado con una editorial de mierda que se llama Fontana. Los conocen, estoy seguro. También estoy seguro que no parecerá que estamos peleados, porque es la editorial de la que más libros tengo, pero necesitas conocer a alguien bien para poder odiarle de verdad1.
Puede que sea mi culpa por preferir la comodidad y conveniencia consumista de ser recordado en el momento que estoy de compras que de hecho no haría mal tener una copia de Macbeth en físico. En fin, la cosa es que lo que al inicio parecía algo práctico comprar libros a un precio estandarizado sin deliberadamente ir a ello al Centro, pero mientras más libros iba obteniendo más iba notando la horrible calidad de edición. Los libros cargan con errores atroces.
Incluso con mi paciencia, las cosas que he visto hacen que me hierva la sangre, pero lo más estresante es lo que no he visto. Verán, cuando leí Sueño de una noche de verano, lo hice con una edición de esta editorial, y casi me da algo cuando lo termino y tengo que preguntarme «Ok, ¿y dónde está el monólogo de Puck? El de Neil, el discurso de mi película favorita... ¿Me lo salté?» No. No estaba. De hecho, creo que párrafos enteros faltaban.
Esto ya me había pasado antes con ediciones feas de La Odisea, pero incluso esos eran resúmenes, así que eso por lo menos ahí yo era el culpable por no leer la versión completa. Aquí, lo único que pasa por mi mente es todo lo que de seguro me perdí y ni me di cuenta en los libros que sólo he leído en estas versiones. Algunos de estos son tomos gruesos; no se puede vivir así, no es humano.
Así que, viendo la Biblioteca de Alejandría quemar frente a mis ojos, recordé que absolutamente todo libro es un libro gratis si te esfuerzas lo suficiente. Realmente creo que la mayoría de títulos que me interesan leer son a este punto parte de dominio público, así que yo podría, por ejemplo, hacer mis propias ediciones dentro de lo que es legal, si es que quiero que eso me limite.
Los scans de anime llevan décadas haciendo sus propias traducciones, y es uno el que tiene que atenerse a la calidad variante que estas pueden tener, pero la verdad es que los que se quejan de ello son aquellos esclavos que quieren depender de los demás. Todas las herramientas están ahí para que uno sea su propio distribuidor, lo único que falta es esa disposición punk del DIY.
Queriendo ser perfeccionistas, uno puede iniciar desde cero, o puede también utilizar lo que recoge de otros lados. Hay una edición en PDF de La divina comedia que me fascina, porque trae arte en acuarelas, viene en verso y está anotada exhaustivamente. El problema con ella es que las anotaciones están al final, una por página, así que hay como 2000 páginas básicamente de espacio muerto; además de una horrible portada. Arreglar el PDF y hacer la versión definitiva de La divina comedia es ahora uno de mis proyectos. Quisiera que más gente hiciera cosas así. Podemos desenterrar textos desconocidos. Podemos hacer pasar novelas ligeras por cuentos infantiles o poner arte anime en clásicos universales. Podemos armar poemarios con las traducciones que más nos gusten de cada poema, como si fuéramos antropólogos reconstruyendo la épica de Gilgamesh. Y lo más importante: podemos dejar de darle dinero a Fontana, que de corazón espero vaya a chingar a su madre.
1. Esto y además de que las relaciones abusivas no son cosa fácil de la cual salir. Quiero creer que he escapado, pero luego veo que el último moretón no había sido suficiente. Soy el tipo de estúpido que cae directo en la trampa al poner un estante girando.
