Maestro
El arrullo musical que escribió un maestro,
donde él derramó toda su sangre y emociones,
es el ego y en él sombra, atormentaciones,
corroyendo a la médula un mísero cerebro
por un aplauso, por tan solo uno siquiera.
¿Qué hace ahora si nunca lo pudo terminar
melancólico sueño inocente que a mostrar
al mundo se atrevió? ¿Y si la historia no encierra
lo que se hubiera podido rescatar, qué hacer?
¿Cómo llorar a perdidas lágrimas pesadas?
Si lo que quiso siempre fue tensiones amargas,
punzantes y desgarradoras, iguales tal vez
al inigualable dolor de su última nota,
aún tierna, aún inconclusa.
28/03/2023